Un sillón largo. Ésta es, ni más ni menos, la traducción desde el francés de ‘Chaise longue’. Y es que es exactamente un sofá con forma de silla, con una prolongación suficientemente larga como para soportar las piernas. Si nunca has probado uno de ellos, cuando lo hagas te darás cuenta de lo realmente cómodo que puede llegar a ser.
El descanso de las piernas en este tipo de sofás es muy bueno, puesto que, a diferencia de otros tipos, puedes tumbarte en él, apoyando la espalda en el respaldo y dejando las piernas descansar a lo largo del sofá. Algunos de ellos, cuentan con un apoyabrazos y otros con dos, variando según el modelo de cada uno.
También pueden venir solos de una pieza, o llevar al lado, más plazas para el sofá, convirtiéndose en un sofá en ‘L’. En la imagen, por ejemplo, puedes ver un chaise longue en la parte de la derecha. Como puedes observar, y sin necesidad casi de probarlo, son sofás muy cómodos, puesto que dejan descansar las piernas y lo que es más importante, la columna vertebral gracias a su estructura.
En cuanto los materiales, lo podrás encontrar en tantos como puedes imaginar, además, al ser un sofá muy utilizado, también los hay de diferentes colores. Por otro lado, respecto a su colocación, quedará muy bien en el salón, tanto delante de la televisión como en un lugar más tranquilo, cerca de la chimenea o una ventana.
Una mesita con una lámpara o incluso, una lámpara de pie al lado, pueden ser la perfecta compañía, así como una manta para los pies en los días de más frío… ¿A qué esperas para tener tu chaise longue en tu hogar? ¡Busca, compara precios y quédate con el que mejor se adapte a tus gustos y posibilidades!
Fuente de la imagen: Polque